Al comprar una cerradura o candado, la variedad de opciones puede resultar abrumadora. Existen múltiples tipos de cerraduras, cada una diseñada con distintos niveles de seguridad y aplicaciones específicas. Aquí te presentamos un desglose de los tipos de cerraduras y manijas más comunes, para que tomes una decisión informada.

Principales tipos de cerraduras y manijas

Desde candados portátiles hasta cerraduras fijas, cada tipo de cerradura tiene un propósito y ventajas específicas. A continuación, te detallamos las opciones más habituales:

1. Candados

Los candados son las cerraduras más reconocibles y versátiles. Son portátiles y no están fijos a una puerta o estructura, lo que los hace útiles para una variedad de aplicaciones. Existen en dos versiones principales:

  • De llave: Requieren una llave para abrirse.
  • De combinación: Se desbloquean mediante un código numérico.

2. Cerrojos

Los cerrojos son esenciales para la seguridad de las puertas exteriores. Se presentan en tres variedades:

  • Manual: Se activa girando una perilla.
  • De un solo cilindro: Es el más común en viviendas.
  • De doble cilindro: Necesita una llave tanto por dentro como por fuera, ofreciendo mayor seguridad.

3. Cerraduras de perilla

Este tipo de cerradura es común en puertas exteriores residenciales, aunque normalmente se combinan con cerrojos para una mayor protección. Al comprar una, es importante asegurarse de que sea robusta y fácil de operar.

4. Cerraduras de palanca

Usadas habitualmente en puertas de locales comerciales, las cerraduras de palanca se caracterizan por tener una manija que se empuja hacia abajo, lo que facilita su apertura. Son una excelente opción para espacios de alta circulación.

5. Cilindros de perfil europeo (Euro Cilindros)

Estos cilindros, también conocidos como cilindros DIN, son comunes en Europa y se encuentran en puertas correderas o divisiones de habitaciones. Vienen en varias configuraciones:

  • Cilindro simple.
  • Cilindro con giro manual.
  • Cilindro doble.

6. Cerraduras de pared

Como su nombre indica, estas cerraduras están instaladas directamente en la pared. Un ejemplo común es la cerradura estilo «caja de bombero», utilizada en empresas grandes para acceso de emergencia o como depósito de artículos de valor.

7. Cilindros de núcleo intercambiable (IC)

Estos cilindros son muy populares en grandes empresas y organizaciones. Permiten cambiar el núcleo de la cerradura sin desmontar el mecanismo completo, lo que facilita el mantenimiento y las actualizaciones de seguridad.

8. Cerraduras para muebles

Se emplean en puertas correderas, gabinetes y escritorios. Hay dos tipos principales:

  • De botón.
  • De perno.

9. Cerraduras de llanta y mortaja

Comunes en puertas comerciales y apartamentos, las cerraduras de llanta y mortaja se diferencian principalmente en el hardware con el que se combinan. Aunque tienen similitudes, están diseñadas para distintos tipos de puertas y ofrecen opciones de seguridad combinadas.

10. Cerraduras de leva

Son frecuentemente usadas en buzones, archivadores y otras aplicaciones de menor seguridad. Estas cerraduras utilizan diferentes tipos de «levas» o colas que interactúan con mecanismos específicos para asegurar el cierre.

¿Cuál elegir?

A la hora de seleccionar una cerradura, es esencial considerar el nivel de seguridad que necesitas, el tipo de puerta o espacio donde se instalará, y las características adicionales que puedan ofrecer. Desde la portabilidad de un candado hasta la resistencia de un cerrojo de doble cilindro, cada tipo tiene un uso ideal.